Se trata de una de las cirugías de columna más habituales, pero no son muchos los que la conocen al dedillo y los que saben más que su nombre sobre ella. La laminectomía, así como la discectomía, se realizan de forma bastante común.
Qué es
Para definir una laminectomía, lo primero que hay que saber es qué es exactamente la lámina. Se trata de la porción de la parte posterior de la vértebra que cubre el conducto vertebral.
Conociendo esta información, es más fácil de entender la laminectomía, que es la cirugía en la que se realiza la extracción de la lámina, aunque también se hace para extirpar espolones óseos o hernias discales.
Esta intervención puede aliviar la presión de los nervios raquídeos o la médula espinal, ya que abre el conducto y genera más espacio.
Cuándo se realiza
La laminectomía se hace con frecuencia para tratar la estenosis raquídea. Se puede hacer junto con una discectomía, una foraminotomía y una artrodesis vertebral. Además, puede ser necesaria como parte de la cirugía para tratar hernias de disco.
En el procedimiento, se extirpan los huesos o discos dañados y se abre más espacio para los nervios raquídeos y la columna. Es por ese motivo que también se la conoce como cirugía de descompresión.
Cómo se realiza
La intervención se realiza mediante una incisión en la mitad de la espalda o del cuello, en función de la zona a tratar.
En primer lugar se apartan la piel, los músculos y los ligamentos. Es posible que el neurocirujano utilice un microscopio quirúrgico para ver todas las partes de la espalda durante el procedimiento.
A continuación, el especialista procederá a extirpar parte o todos los huesos laminares en ambos lados de la columna vertebral, junto con la apófisis espinosa, la parte angular de la columna vertebral.
En algún momento puede considerar necesario realizar una foraminotomía, con la que se ensancha la abertura por donde las raíces nerviosas viajan fuera de la columna vertebral.
Por último, se suele realizar una artrodesis vertebral para comprobar que todo está correcto, y después el cirujano volverá a colocar los ligamentos, los músculos y la piel en su sitio, para terminar con la sutura de cierre.
Cómo es la recuperación
Generalmente, la cirugía dura de 1 a 3 horas y se realiza con anestesia general. La mayor parte de los pacientes regresa a casa entre 1 y 3 días después de la operación. La vida laboral normal suele recuperarse aproximadamente cuatro semanas después.
En la mayor parte de los casos la laminectomía ofrece un alivio total o parcial de los síntomas.